CAPITULO 1O : "POR ESAS PERSONAS QUE APARECEN SIN QUERER..".

¡Buenos días mundo! Hoy me he levantado con ganas de dejar todo atrás, de empezar de nuevo y de olvidarme de todo. ¿Es genial no creéis? Jaime, ya no está en mis planes, y supongo que para dejarlo atrás del todo debería.. Sí debería hacer esto.

Abro el cajón en él que anoche guardé la nota, la rompo en mil pedazos, y lo tiro por la ventana.

“Hasta nunca, mi amor” –Pienso para mí misma, mientras me empiezo a vestir.

Bajo a desayunar.

-Buenos días a todos.

-Buenos días Cris.- dice mi hermano. Me acerco y le doy un beso en la frente.

-Mamá, ¿vamos ahora de compras? Me gustaría tener ropa nueva para la universidad...

-Vale cielo, ¿es esta tarde cuando viene Lara?

-¡Sí!

Más tarde, salimos mi madre y yo a comprar.

-Este año tienes que estudiar mucho cariño.

-Lo sé mamá, si quiero llegar a ser una buena periodista.

Pasa un muchacho por delante nuestra, y se me queda mirando lo miro, es muy guapo, tiene el pelo castaño y los ojos azules... pasa por mi lado, noto como rozan sus manos con las mías, ¡díos!

-¿Pasa algo Cris?

-No nada, nada mamá.- Y le sonrío, nada aparte de que casi se me sale el corazón del el pecho.

Después de una mañana de tiendas, hemos vuelto a la casa con un montón de ropa, no tardo en subir a mi habitación a colocarla en el armario.

Escucho como suena la bb, ¡es Lara!

‘’Estoy al llegar : ) ¡que ganas de verte penca! Y de conocer a ese bombón que tienes por hermano :$ ‘’

Le contesto de inmediato:

‘’Jajajajaja, ven ya gorda :D’’

Toc-toc, llaman a la puerta de mi habitación.

-Espero que estés lista para conocer esta tarde a mis amigos.- me dijo Víctor con una sonrisa encantadora.

-¡Claro! Lara está al llegar.

Bajamos a comer, no me puedo creer que esté tan feliz, no he pensado en Jaime ni una vez, ¡ni falta que hace!

Al rato, llaman a la puerta.

Voy corriendo a abrir, que sea Lara, que sea Lara.

-¡Laaaaaaaaaaaaaaaaaara! –le pego un gran abrazo.

-Yo también te he echado de menos gorda, jajaja- ais, no la puedo querer más, simplemente es la mejor amiga que se puede tener.

Llegó, y con total naturalidad se presentó a los que no conocía y saludó a los que sí.

Subimos a mi habitación, y nada más cerrar la puerta, como no podía ser de otra manera:

-¡Qué bueno está por diooooooooos!

-¡Dímelo a mí! Jajaja –y nos reimos, como lo que somos amigas.

Nos pusimos a arreglarnos, y mientras que Lara estaba en el baño, se acercó Víctor y me dijo:

-Tu amiga Lara es bastante guapa.

Le miré, ¿qué me pasa? Joder... ¿celos? No, no, no es posible.

-Ya. –Y me fui de allí, no me apetecía para nada hablar sobre lo bonita que era ella, y lo buena pareja que podían llegar a hacer.

-Cris, cielo, nos vamos Raúl, los niños y yo, a Madrid, a recoger algunas cosas, seguramente nos quedemos a dormir allí, ya hemos hablado con Víctor, dice que se traerá a algunos amigos, nos os acostéis tarde y no arméis mucho follón.

-Tranquila mamá, tened cuidado en la carretera.

Unas horas después...

-¡Cris, Lara venid! –gritó Victor- estos son mis amigos.

JO-DER, no puede ser.. ¡está el de esta mañana! Me mira y me sonríe, y yo también.

Supongo que os va a costar creer lo que pasó después…